
TRAIL RUNNING ¿son necesarias las sesiones en el gimnasio?

Más que necesarias, las sesiones de gimnasio son un apartado imprescindible en el plan de entrenamiento de un corredor de montaña. Especialmente si el deportista es un principiante en esta lides. Y es más, éste último debería plantearse un par de meses de trabajo exclusivo y continuado en el gimnasio con la idea de fortalecer los músculos. Dicha rutina no será en vano, porque, a largo plazo, contribuirá a disminuir el riesgo de lesiones. En este sentido, si no se hace hincapié en un apartado tan importante como la fuerza, es más que probable que aparezcan diversas molestias físicas.
Tampoco conviene olvidar que el grado de implicación muscular en la carrera de montaña es mucho más elevado que el de las pruebas sobre asfalto. Por lo general, las competiciones de trial running proponen un reto que consiste en cubrir distancias más largas, correr por terrenos más abruptos e inestables y afrontar mayores desniveles. Toda esta exigencia física conlleva la necesidad de trabajar específicamente ciertos grupos musculares no tan habituales en carreras en ruta.
Con todo ello, la clave del corredor de montaña radica en el desarrollo de la fuerza excéntrica (alargamiento del músculo). También resulta un tema capital que en este plan de entrenamiento exclusivo se incorpore como premisa esencial la tarea de trabajar y reforzar la zona del tren inferior.
Lesiones más habituales en trail running
En el capítulo de las lesiones, y aunque resulte un tanto paradójico, correr por la montaña no perjudica tanto a las articulaciones y músculos como hacerlo sobre el asfalto, dado que el impacto es menos acusado.
Aun así, los problemas físicos que con más frecuencia se producen en el trail running son tendinitis, esguinces de tobillo y rotura de fibras. Aunque mención aparte merece el denominado síndrome de la cintilla iliotibial, ya que es el tipo de lesión que más se ve en los corredores de montaña independientemente de su nivel y estado de forma. Dicha dolencia física está caracterizada por sentir una gran tensión en la parte externa del muslo y un dolor intenso en la zona de la rodilla. Y es que la cintilla iliotibial suele venir ocasionada por afrontar descensos largos y prolongados.
Si estás dando tus primeros pasos en el mundo del trail running, y has tomado nota de todo lo expuesto, ya sabes que las sesiones de fortalecimiento y desarrollo de tu tren inferior deben estar presentes en la base de tu entrenamiento en el gimnasio. Así que compatibilizar el gimnasio con los entrenos en la montaña te ayudarán a progresar como corredor, al tiempo que tendrás tus músculos preparados para aguantar la exigencia física de esta atractiva disciplina, y eludir las posibles y temidas lesiones.